Mantener activa la parte artística que hay en nosotros nos potencia. Todos la tenemos, sólo hay que pensar en ello y probar hasta encontrar. 
Debemos alimentarla. 

No sólo explora en nuestro interior, nos descubre nuevas facetas, y nos ayuda a conocernos mejor.

Provoca Psycho-delia o manifestación del alma. Nos evade y nos serena. 

Nuestra piel siempre agradecerá esa serenidad
 (y la lucirá).

Desde el Centro Médico Dermatológico M. Covadonga Martínez-González compartimos el siguiente video elaborado por la Academia Española de Dermatología y Venereología donde se refleja lo apasionante de la relación del arte y la piel: PIEL Y LUZ.

PRESCRIPCIÓN DE ARTE EN DERMATOLOGÍA Y MEDICINA


A lo largo de la historia desde la aparición del Homo sapiens, el arte ha sido no solo expresión de la belleza, sino también de la cultura de la sociedad en su momento, evidenciando una función añadida religiosa, pedagógica, económica y de mejora de la salud desde el punto de vista físico, psíquico y social. La prescripción de arte puede ser una interesante herramienta terapéutica. Numerosos estudios (como el que vemos a la derecha) han demostrado que ofrece beneficios para la salud física y mental, en diferentes países y en diversos ambientes culturales. La prescripción de arte puede utilizarse como una actividad saludable preventiva, alentando comportamientos que promueven la salud y el autocuidado, tal como puede hacer una dieta adecuada o un correcto ejercicio físico. Del mismo modo, se puede dar una prescripción con intención curativa en ciertas afecciones agudas o crónicas, mejorando en todos los casos la relación médico-paciente y el bienestar psicosocial, un elemento clave de la salud holística.

Actividades como la pintura, la literatura, la danza, la música, el teatro... fomentan la expresión emocional y reducen el impacto del estrés en la piel. Se refieren menos síntomas de depresión, mayor salud, felicidad y satisfacción con la vida cuando existen aficiones artísticas, en pacientes, (dermatológicos entre otros), comparando con aquellos que no las tienen. Entre las varias artes, si nos centramos ahora en la danza, es bien conocido su potencial terapéutico. Y así la DANZA-MOVIMIENTO-TERAPIA, según la definición de la Asociación Estadounidense de Terapia de Danza (ADTA; del inglés American Dance Therapy Association) «la terapia de danza/movimiento es el uso del movimiento para promover la integración emocional, social, cognitiva y física del individuo»). La danza-movimiento-terapia puede incluir diversos métodos y se caracteriza por un proceso terapéutico sistemático, orientado a objetivos, impartido por un terapeuta con formación académica. Facilita la expresión corporal y emocional, y mejora la conexión cuerpo-mente, reduciendo los niveles de estrés. Se ha observado que mejora la regulación emocional en pacientes con enfermedades, entre ellas de la piel, que causan un trauma emocional en la vida del individuo (a la derecha vemos un estudio sobre este tema).

                          Compartimos como ejemplo de arte-terapia y danza-movimiento-terapia la interpretación de una copla (música de David Poveda y coreografía de Sandra Lage).